domingo, 27 de febrero de 2011

CARTA PÚBLICA EL 8 DE MARZO ES DE LAS MUJERES


¡LAS MUJERES Y LAS FEMINISTAS DECIMOS BASTA AL AUTORITARISMO Y LA SOBERBIA PATRIARCAL!


El 8 de Marzo es un día conmemorativo de la lucha de las mujeres por nuestros derechos. Históricamente, los movimientos feminista y de mujeres hemos convocado a actos de movilización para colocar en lo público las preocupaciones, demandas, propuestas e imperativos de la construcción de una sociedad anti patriarcal, anti capitalista, anti neoliberal y anti clerical, sin dominaciones, opresiones y exclusiones. Una sociedad hecha de personas libres y autónomas, conviviendo y bien viviendo.

Esta fecha histórica nos encuentra enfrentadas a un gobierno que nos quiere sumisas, pobres, en trabajos precarios, temerosas de dios, desconocedoras de nuestra historia –la del país y la propia–, clandestinas en nuestras decisiones sexuales y reproductivas. Gran responsabilidad le cabe a la Concertación, ya que en 20 años de gobierno no fue capaz de asumir ni jugársela por los cambios estructurales necesarios para redistribuir poder y erradicar la discriminación de las mujeres.

La Coordinadora 8 de Marzo convocó a organizar la movilización, en la perspectiva de un acto político unitario y masivo, que expresara lo que queremos para las mujeres y la sociedad, y lo que no estamos dispuestas a aceptar de ninguna manera. Así como rechazamos el oscurantismo y el medioevo en nuestras vidas, decimos basta a la negación de la existencia social y política de las mujeres.

La convocatoria a la conmemoración del 8 de Marzo hecha por dirigentes de la CUT en conjunto con representantes de la Concertación y de Juntos Podemos Más, el 4 de febrero en conferencia de prensa, es un atropello al movimiento social y político de las mujeres propio de la soberbia patriarcal, y es también un acto anti democrático. Una fecha propia de las mujeres se ha instrumentalizado en función de intereses partidarios que rara vez han mostrado un auténtico compromiso con nuestras demandas históricas. Las prácticas de aprovechamiento y de negación de los movimientos sociales no son nuevas, no han contribuido a generar una cultura democrática en la sociedad chilena, y explican las derrotas.

Este 8 de Marzo las mujeres vamos a estar movilizadas en muchas ciudades y barrios. En donde NO vamos a estar es en una convocatoria que nos suplanta. Mujeres de los partidos y sin partidos, organizadas o no, es hora de definiciones de fondo. La fuerza de la transformación somos nosotras mismas.

¡Marchemos el martes 8 de Marzo, a partir de las 18.30 hrs., desde la Estación Central hasta el Monumento de Mujeres en la Memoria, Metro Los Héroes! (en Santiago)


COORDINADORA 8 DE MARZO

Fuente: Observatorio Género y Equidad

EL AVANCE DE LA INSIGNIFICANCIA


Prof. Danny Monsalvez


Cornelius Castoriados señaló que lo que hoy caracteriza al mundo no son las contradicciones o crisis, sino el avance de la insignificancia; es decir, una involución o anquilosamiento, que se traduce en un “no pensamiento” que produce esta “no sociedad”, proceso social que en nuestro país comenzó a institucionalizarse socioimaginariamente durante los años de la dictadura militar, entre otras cosas, producto del entramado de quienes la sustentaron (elite civil). Lo anterior conllevó -entre otras cosas- bajar los niveles de exigencia de la sociedad en cuanto ética, formas de hacer y concebir la política.
Lamentablemente tras el retorno a la democracia, los gobiernos concertacionistas no lograron (o no quisieron) revertir aquella construcción social; peor aun, progresivamente se fue enquistando e institucionalizando socialmente. Paralelamente, quienes coadyuvaron a fomentar aquel discurso apolítico y de desideologización de la sociedad, comenzaron a obtener los dividendos (económicos y políticos) de lo forjado en aquellos años, siendo en la actualidad los más beneficiados.
Así, el avance de la insignificancia se expresa en determinadas prácticas políticas y sociales: no se hace actividad política sino que animación mediática (política espectáculo); no se tienen ciudadanos sino que público (clientes, votantes). Siguiendo a Castoriadis, son aquellos politiqueros, en el sentido de micropolíticos. Sujetos que los mueve la caza de sufragios por cualquier medio. Su objetivo es permanece en el poder o volver al poder, para ello son capaces de todo y como tanta gente que tiene poder, caen en el viejo vicio de creer que el que no esta con ellos, esta contra ellos. Eluden discutir desde el disenso, por ello se habla de unidad, que en el fondo viene siendo una expresión de un pseudo-consenso generalizado.
De ahí podemos desprender que la insignificancia en sus diversas manifestaciones sea un poderoso mecanismo de aletargamiento que va creando indiferencia y precariedad generalizada, que se traduce en una normalización social y rutina institucional.

(Columna de opinión publicada en El Diario de Concepción, jueves 24 de febrero de 2011, p. 2. )

jueves, 17 de febrero de 2011

DECLARACIÓN PÚBLICA DE LOS CIUDADANOS INDEPENDIENTES DEMOCRÁTICO




Nosotras y nosotros, los Ciudadanos Independientes Democráticos (CID), manifestamos que el conflicto generado dentro el Gobierno Regional se ha desarrollado en base a entredichos de bajo nivel político y que son agravados por la falta de claridad en la información que se entrega a la ciudadanía, transformando el escenario político-social en un crisol de incertidumbres y desconfianzas para la gente, situación que no aporta en nada a la reconstrucción de nuestra región. A nuestro parecer, los funcionarios públicos olvidan que trabajan para nosotros; que reciben mensualmente un sueldo por servir eficientemente a las necesidades de todas y todos los chilenos y chilenas. Por ende, la ausencia de mecanismos de control popular sobre nuestras autoridades exige tanto, como otros puntos, una profunda modificación de nuestro marco constitucional.

Exponemos enfáticamente que la ausencia de delito en la gestión pública no es sinónimo de buena administración y transparencia, dado que la forma (y fondo) del ejercicio de la gobernanza obliga al comportamiento ético, justo y en defensa de la fe pública. La demora en la toma de decisiones no puede confundirse con prudencia, menos cuando existen familias en caleta Tumbes que aún traslada en baldes el agua para su subsistencia; o que deben usar baños químicos (desde hace un año) en aldeas de la comuna de Talcahuano. Esto manifiesta claramente que nuestra clase política no está a la altura de las necesidades del pueblo; lo mediocre se ha transformado en -normalidad- y lo que es peor, se “respalda”. Esta decadencia en la política es histórica, no es un fenómeno que comenzó el 2010 y que al parecer no tiene intenciones de ser modificado.

Los CID mantendremos nuestra postura frente a las denuncias sobre la praxis administrativa regional y comunal (Concepción) acudiendo al Consejo de Defensa del Estado el día lunes 21 de febrero para que éste organismo del Estado se haga parte, si la evidencia así lo permite, de las acciones que esté llevando el ministerio público.

Chile necesita de una alta política, no una mentalidad que se reduce al cálculo electoral y a la cosa pequeña. La Región del Bio Bío no es un feudo y nosotros no somos vasallos, y ante este hecho, la renuncia o despido de los funcionarios públicos frente a negligencias y/o pobreza en la gestión es necesaria para que las energías se vuelvan a concentrar en la reconstrucción que aún no es tal como muchos pretenden hacer sentir.

Luz Roja para Lavín, el MINEDUC y las Universidades.



Ignacio Sánchez del Campo


El Ministerio de Educación advirtió hace unas semanas atrás que en el mes de noviembre abundaría la publicidad estatal para informar sobre el gran incentivo que dará el gobierno para que los alumnos que logren más de 600 puntos en la PSU puedan estudiar gratis pedagogía.
Todos aplauden, inclusive y ante mi sorpresa, el líder de educación 2020, Mario Waissbluth, quien valoró la gratuidad de la carrera ¿Por qué lo resalto? Porque es uno de los pocos frentes ciudadanos exclusivo referente a la educación que van quedando, además del Magisterio y algunos Partidos Políticos que levantan la voz con regularidad, como el Radical, que aún persiste en enarbolar la bandera del “Gobernar es Educar”.
El Ministerio de Educación advirtió hace unas semanas atrás que en el mes de noviembre abundaría la publicidad estatal para informar sobre el gran incentivo que dará el gobierno para que los alumnos que logren más de 600 puntos en la PSU puedan estudiar gratis pedagogía.
El problema es el siguiente: Continuamos edificando estructuras sobre las arenas movedizas de la educación chilena: ¿Es un buen medidor la PSU? ¿Quienes obtienen más de 600 puntos en la PSU? ¿Quienes al final estudiarían gratis? ¿La vocación aparece con los incentivos económicos? ¿Ser puntaje nacional PSU es sinónimo de que tendremos brillantes pedagogos?
Respondiendo la primera pregunta: La PSU es un pésimo sistema de medición en dos formas distintas que incluso van en contra de los objetivos del mismo MINEDUC. ¿Es sensato que el ministerio evalúe con un sistema estandarizado (PSU), si por otra parte a los docentes en los colegios se les exige que realicen evaluación diferenciada acorde a las habilidades y capacidades propias de cada alumno? Es por esto que quiero decir de manera tajante que ES NECESARIA UNA PRUEBA INDEPENDIENTE Y EXCLUSIVA PARA SELECCIONAR A LOS FUTUROS PROFESORES. Aún es tiempo y creo que es necesario que tanto profesores, gremios, partidos y movimientos afines al mejoramiento de la educación, eviten con firmeza la aplicación de la PSU como criterio seleccionador. No basta que mida únicamente habilidades de razonamiento lógico.
La segunda pregunta se refiere a la extensión de la segregación social. La PSU hereda todas las diferencias sociales provenientes de las tres clases de educación (municipal, semi-privada y privada) y las instala en la educación superior. Entonces, ¿estamos diciendo que por salir de un colegio con menores recursos ese niño, medido por la PSU, no va a poder ser beneficiario de la gratuidad de la carrera, porque lamentablemente el destino (inserte la palabra Dios, la vida, Alá, la desidia del Estado o la que usted prefiera) lo hizo estudiar ahí?
He ahí el otro gran problema y tercera pregunta: Se beneficiarán quienes, justamente, menos necesidad tienen de ver pagada su carrera. No digo que lo puedan o no merecer si les ha ido bien, PERO NO MEDIANTE LA PSU, SINO CON UN NUEVO SISTEMA DE MEDICIÓN DE HABILIDADES BLANDAS DESTINADAS A ELEGIR VERDADEROS PROFESORES PARA EL PAÍS. No hay que mirar muy lejos. Esto se realiza para el estudio de la psicología ¿Cual de estas carreras tiene más repercusión en la sociedad? Lo dejo como pregunta abierta.
La cuarta pregunta con que llamo a meditar es: ¿Con el incentivo económico logramos que aparezca la vocación? Gracias al esfuerzo de mis padres provengo de la educación particular pagada, donde obtener 600 puntos es la norma general.
¿Acaso (llamado al Ministro de Hacienda y Legisladores) no ven lo delicado que es para las arcas fiscales pagar “un paseo” por la carrera de Pedagogía? El dinero lo van a recibir de igual forma las universidades, y bueno, el trueque hacia el Estado es “pero tú trabajarás en colegios municipales o semi-privado por 3 años”. ¿Y si se retira en cuarto año? Paga el Estado. La sociedad pierde dinero y un futuro profesor ¿Que pierde la Universidad? NADA. Eso no es responsable. Por eso, y lo reitero, PRUEBA ESPECIAL PARA SELECCIONAR PROFESORES.
Pero creo es necesario ir mucho más allá: ¿Porqué no una universidad del Estado dedicada exclusivamente a la formación docente? Una UNIVERSIDAD NACIONAL DE PEDAGOGÍA, como lo fueron las Escuelas Normalistas. Está bien, ya sacamos al Estado de todo, pero no lo saquemos de la enorme responsabilidad que debe tener en la generación de igualdad de oportunidades desde la cuna. Y esto es que tome un papel primordial en la formación de los futuros educadores y garantizar que estos tengan la vocación y apoyo estatal para ir donde más los necesiten.
Y por último, un pequeño dato “curioso”. Mucho endiosamos a los puntajes nacionales y a las personas con elevado CI. ¿Alguien conoce el CI de los asesinos en serie o de los asesinos organizados? Sobre 105 según el FBI. De seguro eso son 750 puntos en la PSU. ¿Por qué esta comparación tan extrema? Porque se debe eliminar la relación entre alto puntaje PSU = gran profesor.
En resumen, son todos aquellos factores los que nos permiten deducir que nos resulta esencial, como sociedad, instituir una Prueba Independiente de la PSU para seleccionar a los Futuros Profesores del País ¿Por qué? Porque la PSU no identifica las indispensables aptitudes propias de la disciplina docente y, menos aún, la existencia de una efectiva vocación del futuro educador. La gratuidad de la carrera de pedagogía, sin la debida selección, es una pésima decisión del gobierno y las universidades que, como ciudadanos, no podemos permitir.
Y para finalizar comparto con ustedes el siguiente pensamiento: “Otorga en su niñez un buen profesor al pobre de riquezas y, sólo así, verás morir todas las miserias que, en la oscuridad, reinaban la República.”
Con los valores de la Fraternidad y el Laicismo construyamos un país verdaderamente justo, pues la justicia empieza cuando damos a TODOS la oportunidad de surgir”.

Noviembre 2010

domingo, 6 de febrero de 2011

CHILE: TOP EN LA SEGREGACIÓN EDUCACIONAL EN EL MUNDO.





Sebastián Jans

Cada cierto tiempo, la evidencia dura del drama de la educación que vive nuestro país, emerge con particular fuerza, escapando a la lógica de la autocomplacencia o a la pirotecnia del gobierno de turno, para poner en evidencia los resultados del modelo en aplicación, bajo los parámetros del concepto subsidiario vigentes en nuestra educación nacional.
Este último concepto – la educación nacional – es el que ha estado efectivamente en crisis por más de una generación, con los paupérrimos resultados de calidad, desde el momento en que se construyó el actual modelo, basado en la mercantilización y privatización de los servicios educacionales.
Determinada por la intervención de empresarios, a través de corporaciones, sociedades, sostenedores, congregaciones, o cualquier tipo de entidades, la educación solo arroja cifras que muestran siempre falencias, cuando se trata de logros de alcance nacional, como no sea la manida reivindicación de la cobertura de matrículas, el que siendo un logro valioso se pierde frente al resultado general.
Los expertos no dejan de mostrar lo que tenemos al debe, y lo que significa el resultado final en cuanto a la pérdida de objetivos nacionales y logros como sociedad o como país. Una investigación en desarrollo, por ejemplo, ha dado cuenta de la enorme segregación social en las escuelas chilenas. Chile ocupa el segundo lugar en segregación social, entre 65 países estudiados.
¿Qué significa esto? Que las posibilidades de que el sistema educacional mezcle en las escuelas a alumnos de distinto origen social son prácticamente nulas.
La información proviene de la prueba del Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos de la OCDE (Organización para la Cooperación y del Desarrollo Económico), más conocida como Prueba PISA, realizada en el año 2009, y cuyos resultados se han conocido a fines de 2010. Esta información está siendo trabajada por el Centro de Investigación Avanzada de Educación (CIAE), de la Universidad de Chile, según da cuenta el oficialista diario “La Tercera” el domingo pasado.
Los datos, derivados de la muestra realizada en 200 colegios y con la participación de 5.600 estudiantes, no hacen sino confirmar la misma tendencia que se mostró la prueba anterior (2006), en cuanto a que Chile sigue estando entre los “top” de la segregación social en la educación en el mundo.
Los expertos están de acuerdo en que ello está asociado íntimamente a la desigualdad del país, que establece de manera brutal la participación segregada de los educandos en el sistema, de acuerdo a su procedencia socioeconómica. La opinión de los expertos apunta a la carencia de colegios que respondan a políticas de integración, y la experiencia mundial y el resultado de la Prueba Pisa lo confirma, en cuanto a que la educación pública es la única que logra los mejores índices de integración social y garantiza la movilidad social.
De hecho, quienes encabezan los resultados en sentido contrario a Chile, es decir, aquellos que destacan por su integración y por contar con escuelas más heterogéneas, son los países nórdicos, donde la educación en más de un 90% es de carácter pública y gratuita. Suecia, Noruega y Finlandia destacan en sus sistemas educacionales por el concurso activo del Estado, y gozan de una educación de alta nivelación social basada en el mérito y en las oportunidades según el esfuerzo de sus educandos, no importando su procedencia social.
En esos países, en una misma aula, se encuentran alumnos de las clases pudientes, de las clases medias y de sectores pobres, compartiendo la realidad de un mismo país, de un mismo proyecto de sociedad, de un mismo esfuerzo de formación de las nuevas generaciones. Es la misma educación para todos, y todos tienen el mismo piso formativo. Desde luego, ello potencia las capacidades y el mérito, y el país se beneficia de contar con toda la capacidad de inteligencia disponible entre sus niños y jóvenes.
En Chile, en cambio se desprecia a una parte significativa de la inteligencia disponible por ser pobre. A los educandos pobres se les condena a escuelas públicas, cuyas características son conocidas por todos, las que determinan su futuro de modo definitivo. A ello contribuyen todos los actuales prestadores de educación. Es más, la segregación actúa de modo muy eficaz, de acuerdo a los niveles de ingreso: colegios públicos para los más pobres, colegios subvencionados según ingreso para los estratos medios y colegios de excelencia y privados para los más ricos.
El amplio espectro de los colegios subvencionados, en tanto, también estratifica según las condiciones de ingreso o ubicación, porque no es lo mismo un colegio de clase media de una comuna muy populosa, que uno de un barrio de mayor ingreso. Recordemos que los barrios chilenos están drásticamente estratificados por el ingreso, factor que se acentúa según la magnitud de la concentración urbana. Cuanto más grandes es la ciudad mayor es la diferenciación social de los barrios que la integran.
Potenciar una educación pública, laica y gratuita es la única posibilidad de integrar a nuestro país, y potenciar una idea nacional. Es la forma de producir un país donde todos se sumen al esfuerzo del desarrollo y aporten con sus capacidades, no importando su extracción social. Es la manera de que la educación deje de ser un buen negocio para convertirse en un instrumento fundamental y trascendente para hacer país.
Es lo que permitirá que los más pobres sientan efectivamente que la educación es la verdadera oportunidad para lograr un lugar digno en la vida y en la sociedad. Es lo que permitirá a las clases medias sentir un desahogo frente a la constante presión económica de servicios educacionales de alto costo, cuyos resultados en definitiva no son los mejores en términos de la calidad y los resultados académicos esperados.

EL SENTIDO GENUINO DE LA POLITICA



Danny Monsálvez Araneda


Días atrás apareció una encuesta que reiteraba la desafección de los chilenos con la política. Nada nuevo, más bien aquello es el resultado del desprestigio en el cual ha caído la política, que en el fondo no es otra cosa que la tendencia a la despolitización, desideologización de la sociedad, de sus discursos y prácticas, y por otro lado, una concepción (equivocada) que se tiene de la política, al pensar que esta es igual o se circunscribe sólo al juego “institucional”.
Al respecto, la política dice relación como señala Norbert Lechner con la conflictiva construcción de un orden deseado, en el cual un papel fundamental lo constituye la facultad del pensar y hacer colectivo; es decir, como apunta Zygmunt Bauman siguiendo a Castoriadis, la libertad individual solo puede ser conseguida y garantizada a través de un trabajo colectivo.
Lo anterior implica entender que la política esta directamente relacionada con la construcción de sociedad; para aquello, los sujetos requieren preguntarse sobre lo por construir (proyectual). En otras palabras y siguiendo a Tomas Moulian, la política es un campo de luchas y disputas sobre la configuración y constitución de los ordenes sociales y usos del poder, de ahí la importancia de las ideologías (las no excluyentes) las cuales permiten la racionalización de los conflictos para transformarlos en poder puro, es decir, en conflictos trascendentales que tienen que ver con ideas y proyectos de sociedad.
Por ello, la construcción de una sociedad implica intervenir sobre su propio desarrollo y aquello dependerá de la (auto) imagen que se tenga de sí misma; es decir y retomando a Lechner: “solo una sociedad que disponga de una imagen fuerte del nosotros como actor colectivo, se siente en poder de decidir la marcha del país”. De ahí que una de las tareas de la política sea acoger las esperanzas, molestias, inquietudes de los sujetos. En otras palabras, una sociedad que no se cuestiona, que no dialoga del sentido (proyectual) que pretende tener la convivencia actual, esta renunciando a la política como objetivo de construir una comunidad de sujetos.
(Columna de opinión (original) publicada en El Diario de Concepción, sábado 22 de enero de 2011).